Misión de Nuestra Señora de Loreto Conchó Baja California Sur es el lugar ideal para visitar, es un lugar lleno de historia y cultura, ya sea que seas una persona sola que busca unos días de relajación y desconexión, una pareja aventurera o una familia que quiere conocer un poco de la cultura local.
En esta pequeña ciudad llena de historia encontrarás algo ideal para pasar un día simplemente caminando y conociendo cada pequeño rincón.
La Misión de Nuestra Señora de Loreto Conchó en Baja California Sur
Misión de Nuestra Señora de Loreto Conchó es una misión jesuita que se considera la Cabeza y Madre de las Misiones de Alta y Baja California.
Fue fundada por misioneros jesuitas en el territorio Mongui, en la región que los indígenas llamaban Conchó, el 25 de octubre de 1697.
Este pequeño rincón del paraíso tiene siglos de historia.
Fue en el año 1697 cuando un grupo de europeos y personas de la Nueva España pisaron la península para fundar misiones entre los indios pericúes, guaycuras y cochimíes.
A lo largo de la historia hubo varios intentos de colonización hasta que finalmente se le dio el nombre por el que lo conocemos hoy.
Misión Nuestra Señora de Conchó
El 19 de octubre de 1697, ese pequeño grupo bajo las órdenes del padre superior Juan María de Salvatierra desembarcó del galeón “Santa Elvira” en la bahía de San Dionisio en un lugar ubicado a 26° de latitud norte al que los nativos llamaban Conchó, que significa mangle rojo en el idioma nativo, y tomaron posesión del lugar que con el tiempo se llamaría Real de Loreto.
En los primeros días de su llegada, los padres misioneros levantaron una tienda que sirvió como capilla, frente a la cual colocaron una cruz de madera.
El 25 de octubre llevaron en solemne procesión la imagen de la Virgen de Nuestra Señora, en ese ritmo de fe, proclamaron esa tierra como territorio español.
Así comenzó la misión que lleva ese nombre.
Después de la independencia de México en 1821, la misión cayó en decadencia, sin embargo, la misión sobrevivió al abandono, a diferencia de muchas otras misiones fundadas en la península de Baja California por jesuitas, franciscanos y dominicos que fueron abandonadas hasta desaparecer por completo.
Hoy es la joya de las misiones fundadas en la península.
El resurgimiento de la economía y la construcción de infraestructura de comunicaciones en Baja California Sur desde el siglo pasado han beneficiado a la misión, dejando atrás los días de privación.